El crisantemo en la roca

...Quizás una verdadera tumba sin fisuras sería una roca al natural. Como aquella roca de mi pueblo natal y muchas otras. ¿Es esa roca la tumba de una mujer sin sepultura? Si es así, no fue porque la mujer quisiera esa roca por tumba, ni porque hubiera levantado un sepulcro con ella. Fue porque un peñasco natural se convirtió espontáneamente en sepulcro. Pero, ¿existen lápidas sin fisuras? Aunque hay vidas de una sola pieza no creo que existan tumbas de una sola pieza. Si alguna existió, ¿no es aquella roca símbolo de una vida sin ninguna fisura? ¿No lo es también el crisantemo blanco que florece en la roca?
Mientras se abran flores en este mundo y se levanten rocas, yo no necesito construirme una tumba. Mi sepulcro será la naturaleza toda, todo el cielo y la tierra y la leyenda de la mujer de mi pueblo natal.
Y así, pensando en que había podido pasearme contemplando las tumbas de la gente como si fueran obras de arte, mientras imaginaba con vanidad mi propia tumba, placer que me podía dar solo porque estaba vivo, regresé a una Kamakura asaetada por los rayos del sol poniente.

Fuji no hatsu-yuki, 1958